Esta historia sucede en un tiempo atrás no muy lejano, capaz tus padres o mis padres vivieron este momento bastante peculiar de la historia de hombre, donde solo había radio a duras penas y el televisor aun no había llegado al país.
Este era un niño muy inquieto, muy activo se llamaba pepito esteban y por el barrio sus amigos le decían PEPI su vida era normal, su max diversión era salir a jugar el fubolacho en la canchita de enfrente con sus amigos.
Una mañana su cabeza seria transtornada por una noticia que lo dejaría loco, el circo vendría a la ciudad y el esta mas inquieto y emocionado porque seria su primera vez. Luego de un mes de portarse bien, ser obediente, sacar buenas notas y comer las verduras una ardua tarea para todo niño, llego el bendito dia.
Esa mañana no fue normal es como si pudiera oler, era un aroma de expectativa, un aroma de una conjunción de emociones varias de miedo, hasta felicidad. Rompió el chanchito, guardo en su bolsillo y fue en la entrada de la ciudad porque harían una entrada para que llamara la atención. Cuando llego la piel de gallina, las mariposas en la pancita y la cabeza a mil por hora no podían parar, mas cuando llego.
Pasaba el elefante, los malabaristas, los leones, la música, la decoración de las carrozas, la actuación de los payasos y la sincronización que obvio el niño no sabia si estaban haciendo bien o coordinado, lo que le si le exploto la cabeza y el niño de la emoción de ver como se alejaba el circo, se acerco a un payaso, le toco la espalda y le entrgo su ahorro dio vuelta y fue corriendo a su casa feliz y contento, no sabiendo que el verdadero circo no había empezado.
Muchas personas pasan lo mismo que al niño, una persona vive una vida encerrada en su mundo con sus costumbres, normas, reglas y horarios ultra rígidos, en su rutina y lo vive como normal, como algo bueno o de buen gusto y en realidad su interior sabe que hay algo mas, algo mas grande que su mundo, algo que puede saciar esa sed de años en su vida.
Muchas personas son como el niño que va solo al desfile, le saluda al payso y vuelve y no entra al verdadero espectáculo del circo, es una pena decir que mucha gente vive de esa manera, uno no solo puede vivr de un simple desfile o destellos de alegría o momentos de alegría sino va mucho mas alla, que no lleva a entrar al verdadero espectáculo de la vida, y esa vida solo puede llegar a ser exprimida al 100% con Dios, porque estoy seguro que nada de este mundo puede satisfacer al ser humano por completo y de forma d e f i n i t i v a es Dios.
Y en la iglesia muchas personas y yo estaba en esta situación de ser un superbuentipo dentro de la igle y fuera de ahí ser uno mas del monton, adentro rendía mi vida a Dios y afuera con mis actos demostraba lo contrario eso pasa por que es un proceso en la vida de cada persona, asi como el niño no asistió al verdadero espectáculo por falta de conocimiento, asi también a medida que uno conoce y valora las cosas de Dios el cambio ocurre solo.
Creo que el miedo mezclado con la falta de compromiso dan como resultado vidas comodas en sus asientos calentándolos como si fuese su máxima tarea dentro de la igle donde en realidad es una carga de pilas para transmitir ese AMOR fuera de las 4paredes, en las escuelas, colegios, facultades, barrios, trabajos donde en realidad hay necesidad, si el niño hubiera ido al circo, ¿lo compartiría con alguien?
Si algo deseo que se quede contigo de esta historia son 2 cosas:
1- Tenes que vivir y aprovechar al máximo tu vida.
2- Tenes que hacerlo con Dios.
(:
